El pasado lunes, vecinos y familiares golpearon y quemaron vivo a un hombre que señalaron de haber asesinado a su esposa a cuchilladas en el municipio de Chilchotla, en Puebla.
El cuerpo de la fémina fue hallado en un terreno baldío con lesiones de arma blanca en diferentes partes de su cuerpo. Tras indagar, los pobladores determinaron que su esposo había cometido el crimen, por lo que comenzaron su búsqueda.
Cuando lo encontraron no fue entregado a la policía, sino que comenzaron a golpearlo y posteriormente le rociaron gasolina para ser quemado vivo.
Policías municipales arribaron al lugar, pero los lugareños les impidieron el paso; fue hasta que el cuerpo se encontraba completamente calcinado cuando se permitió el ingreso de autoridades.
La gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso Hidalgo, condenó los hechos y pidió a la Secretaría General de Gobierno y de Seguridad Pública iniciar las investigaciones correspondientes.
Lamento los acontecimientos violentos en Chilchotla. Repruebo el feminicidio y linchamiento, la justicia por propia mano es inadmisible. Le pedí al Secretario General de Gobierno y de Seguridad Pública, una investigación para saber si se siguieron los protocolos establecidos.
— Martha Erika Alonso (@MarthaErikaA) December 17, 2018
