Tras 180 minutos de juego, América demostró una vez más que es el mejor equipo del balompié nacional, se impuso 2-0 al Cruz Azul al hacer gala de experiencia y, sobre todo, contundencia, e hizo vibrar 13 veces al Estadio Azteca al levantar el título del Torneo Apertura 2018.
Ambos conjuntos salieron muy precavidos, no iban al frente sin asegurar su zaga, no buscaban una jugada de peligro que al mismo tiempo pudiera comprometer su portería, que dejara vulnerable a su guardameta en un posible mano a mano con un delantero rival.
Cruz Azul hacía su salida al toque, con precisión y recorriendo el balón por todo el terreno de juego para llegar a la zona de Agustín Marchesín, aunque normalmente la jugada acababa antes de llegar al territorio del guardameta.
América jugaba más vertical, con trazos largos y con un motor en el ataque llamado Diego Lainez, por quien pasaban la mayoría de los balones con destino al arco defendido por José de Jesús Corona, las Águilas dejaban claro que buscaban finiquitar todo sin jugar tiempo extra.
Llegó el descanso y no hubo daño en ninguna de las dos porterías, se iban 3 cuartas partes de la Gran Final del futbol mexicano y el grito de gol seguía ahogado tanto para la afición celeste, como para la americanista.
Pero la parte complementaria no debió esperar mucho para hacer estallar ese grito, una mala salida de Jesús Corona provocó que Marcone perdiera el balón ante Oribe Peralta, éste se la dejó a Edson Álvarez y el disparo, desde los linderos del área, fue a incrustarse al ángulo del arco, donde el guardameta cementero nada pudo hacer a pesar de su gran vuelo.
Inició la fiesta en el Coloso de Santa Úrsula, el gol cambió la historia del partido, América tomó confianza, sacó su experiencia, adelantó filas, usó las bandas para atacar y apagó a un Cruz Azul que sólo de momentos parecía reaccionar para ir al frente, pero sin mucha idea futbolística.
Las acciones eran claramente controladas por el cuadro comandado por Miguel Herrera, eran quienes mantenían la calma y aprovechaban la desesperación del rival y los errores que cometían al querer salir lo más rápido posible, lo que ponía a trabajar de más a Corona mientras el olor a grandeza se hacía más fuerte entre la afición azulcrema.
Y el mismo Edson Álvarez dio la estocada final, ya en tiempo de compensación, con un Cruz Azul aún perdido en la cancha, Cecilio Domínguez entró por derecha al área, sacó el fogonazo y, ante el rechace del Jesús Corona, apareció nuevamente su verdugo y finiquitó la Final para darle el campeonato al América y su estrella 13 de la Liga MX.
América obtuvo su decimotercera corona de la Liga MX y en ésta involucró a sus 3 grandes rivales, humilló a Pumas en las Semifinales, derrotó por tercera ocasión en una Final de liga al Cruz Azul y se separó de Chivas del Guadalajara en cuanto a número de campeonatos del futbol mexicano.
Si se habla de Grandeza, se habla del América, Campeón del Torneo Apertura 2018.