La dexametasona ha sido calificado como el primer tratamiento para evitar muertes por COVID-19, así lo han compartido investigadores en Reino Unido, en un ensayo clínico de la Universidad de Oxford.
Los responsables del ensayo clínico Recovery, realizado entre más de 11 mil pacientes, han informado hoy de que este fármaco reduce la mortalidad entre los pacientes muy graves que necesitan respiración asistida y también entre aquellos que necesitan oxígeno, es decir, en pacientes con la enfermedad avanzada.
Peter Horby, investigador de la Universidad de Oxford compartió en su cuenta de Twitter los avances: “La dexametasona salva vidas en COVID-19. El ensayo de RECUPERACIÓN muestra que la dexametasona disminuye el riesgo de muerte en aquellos que necesitan oxígeno en un 20% y en un 35% en aquellos que tienen un ventilador. En el estante, barato y puede ser tomado por todos, un gran avance”.
Aseguró que la dexametasona redujo las muertes en 1 de cada 3 pacientes con ventilador y 1 de cada 5 en pacientes que recibieron oxígeno solamente; en los pacientes menos graves no se observó ningún beneficio.
Con información de El Universal.