‘Salt Bae’ en problemas por acceso ilegal a celebración de Argentina en el campo

Luego de que Argentina se consagrara como campeón del mundial en Qatar 2022, las imágenes de la celebración no se hicieron esperar en redes sociales; fotos y videos de los jugadores celebrando con sus familias. Sin embargo, quien llamó la atención por sumarse a la celebración a pesar de no pertenecer al equipo, fue el chef turco Salt Bae, quien no solo se fotografió con los campeones, también levantó y beso el trofeo del mundial.

Nusret Gokce, mejor conocido como Salt Bae, se volvió famoso en 2017 por su peculiar forma de presentar y sazonar sus platillos en su restaurante.

El chef fue invitado especial de la FIFA con un acceso VIP, pero no estaba habilitado para entrar al campo de juego y mucho menos festejar como si fuese integrante de la delegación campeona del mundo.

Esto no solo cayó mal en la FIFA, que investigará cómo fue que accedió dentro de la cancha y evaluará posibles sanciones, sino que cientos de usuarios lo repudiaron en las redes sociales.

El chef también se acercó a otros argentinos y en su cuenta de Instagram que tiene casi 50 millones de seguidores, publicó videos con Lisandro Martínez y Cristian Romero, con quienes hizo su típico gesto de sazonar los platos. Luego publicó fotos con otros jugadores donde incluso posó mordiendo una de las medallas.

“Tras una investigación, la FIFA ha establecido que algunas personas ingresaron ilegalmente a la cancha después de la ceremonia de clausura en el estadio de Lusail el 18 de diciembre”, dijo la FIFA. “Se tomarán las medidas que correspondan”, agregó la entidad.

No conforme con todo lo mencionado, así como insistir con Lionel Messi para posar juntos, la gota que derramó el vaso, fue cuándo el chef le arrebató la copa del mundo a uno de los jugadores para levantar y posar con la foto, algo que según las reglas de la entidad, el trofeo es un “ícono de valor incalculable y sólo puede estar en manos de un grupo “muy selecto” de personas, incluidos los ganadores del torneo, los funcionarios de la FIFA y los jefes de estado”.