Una elefanta embarazada murió luego de que alguien le diera de comer una piña llena de explosivos cerca del río Velliyar, en el estado de Kerala, al sur de India; los hechos han provocado gran indignación mundial.
Los hechos ocurrieron el pasado 27 de mayo, y de acuerdo al oficial forestal Mohan Krishnan, la elefanta ingresó a una aldea en busca de comida e ingirió la fruta con explosivos que le destrozó la mandíbula y lengua.
“Deambuló varios días soportando el dolor antes de morir de pie en el río Velliyar (…) las heridas le causaron una sepsis que le provocaba dolor y le impidieron comer durante casi dos semanas”, mencionó el oficial.
Las autoridades identificaron algunos sospechosos y arrestaron a una persona; se dio a conocer también que los aldeanos de la zona tienden a usar explosivos en la fruta, fuegos artificiales o vallas electrificadas para proteger sus cultivos de la fauna silvestre.