Ali Sander y Michael habían intentado quedar embarazados durante varios años sin éxito, ya que los habían diagnosticado como infertiles, por esa razón decidieron adoptar a dos mellizos.
Ante la llegada de los bebes, Michael se mostraba bastante feliz, inmediatamente se encariñó, sin embargo con Ali todo era muy diferente pues aseguró que no sentía ningún tipo de conexión.
Para Michael los síntomas de su esposa lo hizo decidir llevar a su esposa al médico, y fue así que se llevaron una gran sorpresa al recibir el diagnóstico de que Ali estaba embarazada.
Pero fue cuando la joven pareja de Reino Unido se enteraron que esperaban a su primer bebé de forma natural que decidieron cancelar el proceso de adopción y regresar los pequeños de tan solo ocho meses. Ya que les seria complicado poder mantener a los 3 bebés.
Ali sin dudarlo llamó al servicio social para explicar la situación y pedir que el proceso de adopción se cerrara, y así buscaran una nueva familia para los pequeños de ocho meses.
“Pensarán que soy una mujer malvada” añadió Alí Sander
A los meses nacio su hijo biológico Jacob, y luego volvió a quedar embarazada. Hoy en día son una familia completa pero tal vez nunca olvide la mala experiencia por la que pasó.