La Iglesia católica en México reprobó el culto al Santo Niño Huachicolero, a quien se encomiendan las personas que se dedican al robo de gasolina y cuya imagen se volvió viral en redes sociales.
El sacerdote Hugo Valdemar, de la Arquidiócesis de México, aseguró que «la Iglesia católica censura totalmente el culto al Santo Niño Huachicolero, ya que es una práctica supersticiosa producto de la ignorancia».
Asimismo, el sacerdote añadió que este culto atenta contra el mandamiento «no robarás». «Es blasfemo pensar que Dios bendice o protege el robo. Un robo en el que además está metido el crimen organizado y está manchado de sangre y corrupción».
El Santo Niño Huachicolero es un niño Dios modificado, que sostiene una manguera para extraer gasolina, la cual está conectada a un galón de plástico.