En seis ciudades de México, donde se registran los más altos índices de violencia, se han adquirido cerca de 12 contenedores frigoríficos para resguardar cuerpos que no han sido identificados y que no caben en las instalaciones de los Servicios Médicos Forenses.
Al menos en Guerrero, donde se encuentran los municipios más violentos del país (Acapulco, Chilpancingo e Iguala) utilizan 10 tráilers especiales, con una capacidad para almacenar 900 cadáveres.
En Veracruz, las recientes ejecuciones y hallazgos de fosas clandestinas en Xalapa y Alvarado, han saturado los servicios del Semefo, por lo que las autoridades estatales han recurrido a la compra de un contenedor frigorífico con capacidad de 300 cuerpos.
El aumento de la violencia en Tijuana, Baja California, donde se registran 300 ejecuciones al mes, según información del portal Vanguardia, obligó al gobierno estatal a adquirir una unidad con sistema de refrigeración y en la que caben 50 cuerpos.
En el caso de los cuerpos almacenados en dos tráilers en Jalisco, las autoridades informaron que cerca de 20 cuerpos de los 332, ya fueron inhumados en el panteón de Guadalajara, mientras que cientos de familiares de todo el país acuden a hacerse pruebas de ADN para localizar a sus seres queridos desaparecidos.