Luego de acusarlos por supuestamente intentar robarse a unos menores de edad, dos campesinos fueron quemados vivos por habitantes del municipio de Acatlán de Osorio, en Puebla.
De acuerdo con los primeros reportes, un grupo de pobladores, al enterarse de que los dos hombres eran presuntos «robachicos», fueron hacia ellos y comenzaron a golpearlos, hasta que la policía intervino y los trasladó a la cárcel.
Tras no quedar conformes, los habitantes entraron a la comandancia y sacaron a los dos sujetos para seguir golpeándolos. Posteriormente los amarraron y los tiraron a las afueras de la cárcel para luego rociarles gasolina y prenderles fuego hasta que perdieron la vida.
Las víctimas, Alberto flores Morales de 53 años y Ricardo Flores Rodríguez de 22, eran padre e hijo campesinos y no tenían nada que ver con delito alguno, puesto que eran inocentes, informó la Fiscalía del Estado.
Las autoridades lograron detener a dos policías por supuestamente entregar a los dos campesinos a los pobladores y ya se inició con la investigación correspondiente para dar con los responsables de este asesinato.